Congreso Nacional de Delegadas y Delegados
En el Congreso Nacional de Delegadas y Delegados de SADOP; el tercer panel estuvo dedicado al tema de la Salud, y se dividió en dos conversatorios. El primero se tituló “El proceso de trabajo y la salud del colectivo laboral docente” y el segundo, “La salud mental es un tema de todas y todos”.
La socióloga y coordinadora del Departamento de Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo (CYMAT) de SADOP Nación Julieta Cháves fue la primera oradora. Al comenzar, señaló que “proyecto de país, medio ambiente y condiciones de trabajo están íntimamente ligados” y que “para pensar la salud laboral lo primero es que nos reconozcamos como trabajadores y trabajadoras”.
Luego, invitó a “pensar la escuela como lugar de trabajo en un tiempo histórico determinado: allí pasamos gran parte de nuestra vida, construimos vínculos y construimos nuestra identidad como trabajadores y trabajadoras”.
En esa línea, la socióloga afirmó que “el proceso de trabajo en la escuela fue tomado del proceso de trabajo de las fábricas: hay muchas similitudes: son procesos seriales y parcializados”. “Tenemos que romper con esa mirada y ver la escuela como un colectivo de trabajadoras y trabajadores donde se produce un trabajo colectivo”, desafió.
Asimismo, planteó que “el plus por presentismo y por insalubridad, por ejemplo, son mecanismos de compensación con los que el empleador le pone precio a la salud (…) La salud no es un problema individual, es un problema de todos y todas. Es importante además que lo miremos con perspectiva de género, sobre todo teniendo en cuenta que es un colectivo compuesto mayoritariamente por mujeres. Sin acción colectiva no hay posibilidades de alcanzar mejores condiciones de vida. Mejorar nuestras condiciones de trabajo es parte de la justicia social”.
A continuación, Magdalena García Salciarini, Licenciada en Relaciones del Trabajo, especialista en Género y Sociedad e integrante del Departamento CYMAT SADOP Nación, celebró el debate de la reducción de la jornada laboral. “La jornada laboral en Argentina sigue siendo la misma desde hace cien años, por eso este momento de debate es tan importante. Los trabajadores de la docencia necesitamos tiempo de descanso, tiempo libre y de ocio, tenemos derecho a eso”, remarcó.
La especialista indicó que, además, las mujeres padecen una doble carga horaria. “El 80% del trabajo no remunerado en la región lo hacemos las mujeres, por lo tanto hay una doble invisibilización que consiste en estar a cargo de las tareas de cuidado y las tareas de docencia, que muchas veces son fuera de horario”, ejemplificó.
La moderación de este panel estuvo a cargo de la Secretaria de Organización de SADOP, Daniela Moreno.
“La salud mental no es un tema biosanitario, médico o un tema de psicólogos: hay muchos factores que inciden”, planteó el Licenciado en Psicología Mariano Suárez, que añadió que “ganar o perder salud mental tiene que ver con una dinámica vinculada a la concreción de derechos humanos sociales”.
En ese orden, apuntó contra la pandemia como punto de quiebre y desencadenante de la crisis de salud mental que, a su vez, puede leerse como “una crisis de producción de subjetividad”.
Como integrante del Departamento CYMAT SADOP Nación, Suárez manifestó que “la salud mental es un tema de todos y todas. Desde la organización (SADOP) tenemos que ofrecer un espacio para generar una respuesta ética, singular y que considere a la escuela como organizador simbólico de la sociedad”.
A continuación, la Licenciada en Psicología, docente e investigadora en temas de Salud Mental y Trabajo, Miriam Wlosko señaló que “el trabajo no es indiferente a nuestra salud. Puede generar gratificación, placer y engrandecimiento de nuestras habilidades; pero también sufrimiento, enfermedades o muerte”.
En ese sentido, agregó que “quienes tienen jornadas laborales de más de 55 horas semanales son quienes más riesgo de mortalidad tienen” y que “la legislación argentina no reconoce la presencia de riesgos psicosociales en relación con el trabajo. Nuestra ley no contempla que podamos padecer: no podemos pedirnos licencia, no tenemos cobertura”.
Sin embargo, la psicóloga invitó a hablar del sufrimiento —inherente a la condición laboral— y a construir desde él. “El sufrimiento no es patógeno en sí mismo, pero puede enfermar. Hablar de sufrimiento nos permite salirnos de visiones patologizantes de la enfermedad mental para poder defendernos individual y colectivamente”, propuso.
Entre los detonantes de este sufrimiento en el ámbito del trabajo, la expositora destacó los siguientes: la vivencia de desborde; desencaje entre el compromiso en el trabajo y el reconocimiento; desfasaje entre el contrato inicial, el trabajo prescripto y el trabajo real; impotencia relacionada con la fragilización de la función docente; desorientación por mandatos y conminaciones burocráticas; doble discurso; pérdida de sentido; soledad, tristeza y depresión, son algunos, que también tienen un rol político.
“Lo que se está jugando en el país es también cómo usa la política el sufrimiento. La política se puede apropiar del sufrimiento y hacer algo con él: la derecha utiliza el sufrimiento para decir que el de al lado es el culpable de lo que nos pasa. Pero también se puede construir desde el sufrimiento, que es lo que estamos haciendo acá”, cerró.
Claudio Gelati, el Secretario de Acción Social de SADOP y Presidente de OSDOP, llevó adelante la moderación de este panel.